No se si morderte la boca
o quedarme en ella una eternidad momentanea,
si salvarte la vida de mi
o la mia de tu mirada,
y mientras,
aspiro segundos
y celo manadas ajenas,
de manos, que no de lobos
que aúllan mis entretelas,
y los alzo de imaginarme,
y descendidos los abandono para olvidar.
Que facil elevar vacuos mundos sin una mirada,
que infierno no tenerla la tuya para poder quemarla.
Amor y destrucción. Es tanta la pasión que emanas que serías capaz de demoler hasta el último suspiro. Bravo!
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La intensidad, creo, es parte de mi sello personal. Gracias Natalia!! Besos
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Muy bueno! Me incorporo como seguidor. Abrzs
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Muchisimas gracias y bienvenido!!
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